sábado, 25 de febrero de 2017

Vanda vietnamica

  Esta planta fue descubierta por el botánico checo Jiri Haager mientras realizaba una expedición geológica por el sur de Vietnam, y dio lugar a la creación de un nuevo género monotípico (1993) nominado Christensonia vietnamica. Desde la publicación de Genera Orchidacearum Vol. 6, ahora se incluye en el género Vanda.


  En su lugar de origen se la encuentra creciendo en bosques secos, deciduos o semi-deciduos de tierras bajas a elevaciones que no superan los 700 msnm. en una región donde las lluvias no son abundantes.

  Vanda vietnamica es de tamaño mediano (30cm) de crecimiento monopoidal, epífita, erecta. Posee numerosas raíces hacia la base del tallo. Sus hojas son coriáceas, de unos 6 cm. de largo, dispuestas a lo largo del tallo. La inflorescencia surge a lo largo de las axilas foliares superiores, mide unos 10cm y carga hasta 5 flores de color amarillo verdoso y su labelo es blanco.


  Se la debe cultivar en un lugar con luz filtrada o difusa, donde nunca estén expuesta al sol directo en las horas del mediodía. También debe ser un lugar bien aireado en todo momento.

  Las temperaturas en su habitat natural son más bien cálidas durante los 12 meses con máximas promedio de 32/33ºC en verano y las mínimas de invierno rondan los 19/20ºC. Aunque en cultivo se adaptan bien a temperaturas inferiores. 




  La humedad debe ser alta, rondando siempre promedios de 75/80%.  Las lluvias en la región son leves en la mayor parte del año, siendo el otoño el momento de mayores precipitaciones. La humedad ambiente está dada por los continuos rocíos matinales y pesadas nieblas nocturnas. En cultivo las plantas de V. vietnamica deben ser regadas bastante seguido en su etapa de crecimiento, dejado secar sus raíces entre riegos.


  Su cultivo se puede hacer montada en un tronco o balsa donde se deberá regarlas más seguido, sobre todo en la temporada de verano para mantener la humedad. Otra buena opción es una canasta con un sustrato que no retenga agua en exceso.

martes, 14 de febrero de 2017

Día del Orquideófilo Argentino

El Grupo Orquideófilo del Norte Santafesino saluda a sus socios y a todos
los cultivadores de orquídeas al celebrarse el Día del Orquideófilo en la Argentina.
Recordando el natalicio de Maevia Noemí Correa, destacada botánica argentina,
dedicada al estudio de las orquídeas, en honor a quien se recuerda todos los
14 de febrero el día de los cultivadores de orquídeas en Argentina.



lunes, 13 de febrero de 2017

Prosthechea mariae (Ames) W.E. Higgins

Eduardo A. Pérez García
Facultad de Ciencias
Universidad Nacional Autónoma de México
                                                                     

  Esta especie es quizá una de las orquídeas más hermosas que crecen en México. Tiene además varias características que la hacen incluso algo más especial. Entre estas características podríamos empezar por mencionar, que a pesar de lo bello y diferente de sus flores fue descrita como una especie diferente hasta hace relativamente poco tiempo. Originalmente la especie fue descrita por el célebre orquideólogo norteamericano Oakes Ames, en 1937. La fecha de descripción de esta orquídea ahora nos suena como algo antiguo, pero habrá que considerar que muchas orquídeas mexicanas fueron descritas uno o incluso dos siglos antes.

Prosthechea mariae. Foto y cultivo Eduardo A. Pérez García.

  Como ya es pan de todos los días, un asunto que se tiene que abordar cuando se presenta una especie es el nomenclatural. Originalmente esta especie fue descrita como Epidendrum mariae Ames, y posteriormente fue ubicada dentro del género Encyclia por el botánico brasileño Frederico Carlos Hoehne, en1952. Este nombre permaneció por mucho tiempo y muchos así la conocimos. En el libro "El Género Encyclia en México", Robert L. Dressler y Glenn E. Pollard (1974) propusieron la sección Euchile para agrupar a dos de las especies más bonitas de nuestro país, la Encylia mariae y la E. citrina (aunque ahora sabemos que esta última en realidad es un complejo de al menos tres especies distintas). Esta sección se ubicó dentro del subgénero Osmophytum (que ahora conocemos como el género Prosthechea), y se le denominó como Euchile, Este nombre significa labelo bello, en función de que esta estructura floral es muy sobresaliente en ambas especies. En 1998, Carl Withner Jr. realizó el cambio nomenclatural y reconoció a Euchile como un género diferente, quedando el nombre como Euchile mariae (Ames) Withner. No obstante, más o menos en esas mismas fechas, Wesley Higgins transfirió a la especie al género Prosthechea quedando el nombre como P. mariae (Ames) W.E. Higgins. Este ultimo nombre parece tener más sustento botánico y evita el uso de más géneros, por lo cual lo utilizaré en este texto.

Prosthechea mariae. Foto y cultivo Eduardo A. Pérez García.

  La Prosthechea mariae es una especie relativamente fácil de distinguir, ya que presenta flores moderadamente grandes, mientras que las plantas son más bien pequeñas. Las hojas son también algo características pues tienen un color verde-grisáceo o son algo blanquecinas. Las inflorescencias no son ramificadas, tienen hasta de 27 cm las más largas, pero generalmente son más cortas. Presentan de una a cinco flores cada racimo. Las flores son muy llamativas y presentan un aroma muy ligero, con los pétalos y sépalos de color verde limón o amarillentos. Ambos segmentos florales son de buena textura, algo carnosos. Las flores suelen ser algo colgantes y llegan a tener hasta 7 cm de diámetro. El labelo suele ser la parte floral más conspicua y alcanza a sobrepasar los 7 cm de largo y unos 5 cm de ancho. El labelo es blanco, sin mucha textura, y normalmente presenta venas de color verde, sobre todo en la garganta. Las plantas son muy compactas, y los pseudobulbos apenas alcanzan los 6 cm de alto, y casi no hay separación entre los pseudobulbos. Éstos son de color verde-blanquecino. El período de floración va de mayo a julio.

Prosthechea mariae. Foto y cultivo Eduardo A. Pérez García.

  Quizá una de las razones por la cual la P. mariae fue encontrada y descrita hasta hace poco tiempo es que crece en una región donde no se espera encontrar muchas orquídeas. Esta especie es endémica de la Sierra Madre oriental de México, y su distribución es casi coincidente con la región Huasteca, en los estados de Tamaulipas, San Luís Potosí, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Veracruz y Puebla. Particularmente se desarrolla en bosques de encinos más bien secos, a unas altitudes de 800 a 1300 m.s.n.m.. En menor medida también se le ha encontrado en bosques de pino-liquidámbar y en bosques de neblina.

Prosthechea mariae. Foto y cultivo Eduardo A. Pérez García.

  El cultivo de esta especie es algo difícil fuera de las regiones montañosas de México, pues les gusta el calor en el día y templado en las noches. En la ciudad de México se dan con relativa facilidad en el exterior. Sólo hay que sembrarlas en un tronco o un medio que drene muy rápido. Pues si se les acumula el agua, sobre todo durante las noches se pueden podrir. Hay que darle bastante luz y mucha ventilación.

Prosthechea mariae. Foto y cultivo Eduardo A. Pérez García.

  Al parecer es un especie todavía algo común en algunas partes del país, por lo cual no está en un inminente riesgo de extinción; sin embargo, hay que evitar que sus poblaciones se sigan saqueando y tratar de que sus hábitats sean protegidos. Desafortunadamente no se ha reproducido por semilla en México para seleccionar los mejores clones. De forma contraria, la P. mariae ha sido relativamente bastante utilizada para generar algunos híbridos interesantes. Entre algunos que pude encontrar en internet están el híbrido con P. citrina (probablemente más bien haya sido con P. karwinskii). Algunos otros como Epc. Little Sweetheart que es el híbrido de Cattleya Endless Summer con P. mariae y el híbrido primario Bepi. Jim Wallace que es el resultado de la cruza de Rhyncholaelia (ex Brassavola) digbyana con P. mariae. Uno que es particularmente interesante es el híbrido Prosthechea Ed Moore, el cual es la cruza de P. mariae con P. vitelina. Algunos híbridos de segunda generación ya han aparecido en el mercado, dando muy buenos resultados; como por ejemplo Epicattleya Siam Jade (Epicat. Vienna Woods x C. Penny Kuroda), donde la Epicat. Vienna Woods fue el resultado de la cruza de P. mariae con Cattleya guttata var alba.

Híbrido de Prostechea karwinskii y P. mariae. Foto tomada de internet.

  Etimología, según Manuel Pontes, el epiteto específico de “mariae” es en honor a la esposa de Otto Nagel.

  Agradezco a la Familia Rodríguez y a O. Francke por haberme obsequiado las plantas de esta especie, que no tenía en mi colección.


Referencias
Dressler, R.L. y G. Pollard. 1974. El Género Encyclia en México. Asociación Mexicana de Orquideología. Mexico, D.F.158 pp.
Soto, M.A. 2002. Euchile mariae (Ames) Withner. Icones Orchidacearum 5-6: Plate 584.



miércoles, 1 de febrero de 2017

Ceratostylis retisquama


  El género Ceratostylis fue descrito por Blume en 1825 y actualmente reune a más de 150 especies distribuidas por el sur-este del continente asiático, desde la región del Himalaya hasta Nueva Guinea. En el caso de Ceratostylis retisquama es una especie endémica de Filipinas donde está distribuida en la gran isla de Luzón en el norte, en elevaciones que no superan los 500 msnm..


  Es una planta epífita de crecimiento simpodial, péndula, que puede llegar a tener 40cm de largo, tienen un tallo corto cubierto de bracteas amarronadas superpuestas. La flores surgen de la base de la planta, pudiendo cada crecimiento tener varias flores a la vez y florecer varias veces en el año, aunque la temporada de mayor floración es otoño-invierno. Sus flores son de color naranja rojizo que alcanzan un tamaño de 4cm..


  Para el cultivo de Ceratostylis retisquama hay que tener en cuenta que requiere de alta humedad durante todo el año (verano 80%, invierno 70%), porque si bien las lluvias son abundantes desde primavera y hasta otoño, para luego ser escasas en los meses de invierno, allí la humedad se sostiene gracias a los rocíos y neblinas. 


  Por lo expresado en el párrafo anterior, si se decide cultivarla montada en un tronco hay que tener en cuenta que exigirá varios riegos diarios en los días más calurosos. Si no se tiene alta humedad ambiente o no quiere regarse tan seguido, la opción es colocarla en una canasta o maceta, siempre asegurándole un buen drenaje para que no haya excesiva retención del agua de riego.


  En cuanto a la temperatura hay que tener que es una especie que proviene de lugares cálidos donde los promedios máximos son de 29-31ºC y mínimos de 18-20ºC, aunque puede soportar temperaturas más bajas. 


Ceratostylis retisquama Rchb.f., Bonplandia (Hannover) 5: 53 (1857).

Sinónimos heterotipicos:
Ceratostylis latipetala Ames, Philipp. J. Sci., C 4: 671 (1910).
Ceratostylis rubra Ames, Philipp. J. Sci., C 4: 670 (1910).